07 octubre 2011

Proyecto enlace 4ª parte "De agua (eso sí, limpia) hasta los huevos, literalmente"



Pues sí, no fue literario fue literal. Un finde de Septiembre con el ánimo de pasar el "laminador fatal" seco del sector pantano, aunque seco de momento, ya se verá cuando empiecen las lluvias, nos decidimos a continuar con el proyecto enlace, con cien hipótesis en la cabeza sobre las direcciones y caudales de los ríos encontrados en esta galería y de la dirección de la galería en sí menos convincente que su título principal partimos el viernes hacia Bustablado Luis, Manu y yo. Manu y yo volvíamos de Picos, habíamos estado el día anterior haciendo unos trabajos de topografía para colaborar en la recuperación del "Lago de Ándara" y decidimos quedarnos a dormir en Bustablado y cenar en el "Bar Romano" huevos con patatas fritas y otros manjares de la casa, Luis traía el estómago revuelto y decidió prescindir. Después de la cenorra fuimos al parking y charlamos entre el verde rebelde hasta las 2 de la mañana. Al día siguiente a las 11:00 creo recordar entrábamos por la torca, yo iba bastante ligero y avancé mientras las voces se apagaban a mis espaldas, me detuve unas cuantas veces a mirar grietas, chimeneas y curiosidades y en algún momento logré escucharlos de lejos. Avancé hasta el último pasamanos y les esperé tumbado, cuando casi estaba dormido llegaban y me puse en marcha, esta vez avanzamos juntos, esta vez había pozas de agua que en algunos casos llegaban hasta mitad de la catiusca y llegamos al último punto de topo. Cerca había una chimenea y una gatera, hoy tenía el día revoltoso y estaba a todo, primero trepé la chimenea en oposición unos 10 metros y continuaba, perdiendo la verticalidad, haría falta bie de material para seguir progresando, así que bajé y me colé por una gatera en la que de repente noté que el aire me daba en la cara de lleno, vi que era bastante estrecha y que giraba a la izquierda, así que llamé a Manu para que subiera y que me ayudara si no podía salir, fui avanzando poco a poco con un brazo delante y otro detrás hasta metro y medio más o menos hasta legar al giro donde se agrandaba un poco más, aquí (pensé) creo que podría dar la vuelta, así que avancé otro metro y medio tras el giro y el aire salía del agujero, dí un puñetazo a la tierra y vislumbré que al fondo abría a metro o metro y medio, tendría que volver a por la maza para apartar tierra y no habíamos comenzado a topografiar y explorar lo que veníamos planeando, así que decidí volver y apuntarlo con buena letra en la topo para otro día. Bajé hasta la galería y comenzamos a topografiar, había más agua que otros días e intentábamos no mojarnos los pies, noté mi pié mojado y vi que una fisura en mi catiusca rezumaba, así que tuve que hacer más esparajismos para no mojarme. La galería de repente tomó rumbo norte y nos motivamos , era la dirección que nos interesa.
Llegamos a un paso donde estaba complicado no mojarse, ya que había que pasar por una estrechez a la altura de las rodillas entre dos piedras y con una poza de agua por delante y por detrás, estaba ya cansado de esforzarme en no mojarme así que pasé sin más mojándome hasta las rodillas, pasé las sacas y me partí el culo viendo pasar a Manu y a Luis, chillaban como nenas, voy a ser sincero, yo también chillé al pasar. Seguimos topografiando, yo apuntaba y detrás venían estos haciendo virguerías para no mojarse, yo avanzaba con poco cuidado en ese aspecto, y una de las pozas se hizo más profunda y algo en mí se encogió y no fue el corazón. Seguimos en este plan hasta llegar a la madre de las pozas, unos dos metros de profundidad, y altura hasta el techo medio metro, necesitábamos neopreno así que con la misma nos dimos la vuelta, estábamos empapados y decidimos comer fuera, no era muy tarde, pero al menos teníamos hora y media hasta la calle.
Al volver, instalé una cuerda en el último pasamanos para ver hacia donde circulaba el río y si había opción de seguirlo sin arrastrarse, pero no era posible. Seguimos casi hasta la salita de la"gatera alfonsina", donde hay una gran chimenea y un par de ventanas, trepé la primera ventana más cerca del suelo, Manu y Luis me pasaban el material desde abajo, al llegar estaba colmatado de barro, y la dirección venía de la ventana de enfrente, así que mientras yo bajaba Manu se puso a trepar a la otra ventana, cuando llegué abajo Manu intentaba subir pero resbalaba bastante, lo intenté con ayuda de las manos de Manu y Luis y conseguí pasar, comencé a subir intentando no tocar un montón de bloques encajados en la grieta, subí unos 15 metros hasta llegar a otro montón de piedras, me pareció que detrás continuaba sin la necesidad de seguir trepando, pero no me gustaba la idea de pasar entre las piedras, pensé que mejor sortearlas por arriba metiendo unos cuantos anclajes, pero tenía todo el material abajo. Descendí hasta una ventana y estos me tiraron una cuerda, pero quedó en una repisa a unos 2 metros, así que comencé a tirar bolas de barro para echarla abajo, al principio se movía pero después de unas cuantas se apelmazó y se quedó trabada con las bolas de barro, así que me tiraron un martillo con su cordino, esta vez llegó a mis manos, casi a mi cara, con él en la mano me le anclé a una baga y comencé a tirarlo a ver si podía engancharlo en la cuerda y tirar de ella, tambíen enganché el descensor abierto y conseguí acercarlo lo suficiente para poder alargar la mano y cogerla, les tiré un cabo y me pasaron el taladro, anclajes y demás, después de media hora conseguí tocar suelo firme.
Estábamos sin comer, mojados, Manu temblaba, llenos de barro, y salíamos muy poco a poco, yo me encontraba muy pero que muy cansado, así que subí la pirelli con Luis con muuuucha paciencia, subí hasta la base del pozo y esperé a Luis para subir juntitos de la mano y hacernos carantoñas, al dar las dos primeras pedaladas tuve que hacer un parón, estaba supercansado, Luis me dio unos mimos y conseguí avanzar poco a poco.
Cuando coronamos la cumbre estaba lloviendo a mares, nos cambiamos en el "prao" con rápidos movimientos y bajamos al Bar Romano a meternos otra cenorra, después, cada mochuelo a su olivo.
Con este giro de la galería al norte y esta gatera sopladora, este sector se pone muy interesante...


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