Esa energía que normalmente nos hace levantarnos por la mañana para intentar llevar a cabo los proyectos e inquietudes que mueven a las personas, se había esfumado y no lograba encontrar donde. Había pasado varios meses un poco desmotivado, con apenas ganas de hacer cosas...últimamente la espeleología no despertaba en mi esa "chispa" como de costumbre y había dejado algo de lado la exploración. Después de pasar casi mes y medio sin calzarme las botas, entre en Urbío con una resaca cabalgante y apenas ganas de cansarme más, en la última campaña de exploración (hace una semana). Un surtido grupo de gente desinstalamos varias cuerdas y material para utilizarlo en la Cueva del Rescaño, donde vamos a centrar los trabajos de exploración en la primera parte de este año buscando una conexión entre las dos cavidades (Rescaño-Urbío).
Habíamos acordado pasar un par de semanas de descanso para empezar después a explorar con ganas, pero el martes propuse el hacer una salida ligera a revisar y continuar unas cosillas que habíamos dejado a medias hace dos años y medio. Seduje a la gente con un "tranquilos, no hay barro, sólo hay que andar por zonas amplias y cómodas, se llega en media hora"...no se por que pero no me lo creía ni yo. Me estaba recordado a alguien que utiliza las mismas artimañas para camelar a sus posibles presas. Por supuesto todo era mentira, hay barro, se necesitaba el equipos para subir por cuerda, gateras, pasos estrechos etc. Todo lo contrario a lo que les había vendido, pero no había otra forma. Quedamos para salir finalmente Jara, Manu, Pelos y yo el sábado de buena mañana a eso de las 10:40 para mi, 11 para el resto. Por una vez llegaba a la hora y me tocaba esperar como castigo a mis continuos retrasos. Despegamos hacia Udías y a eso de la 12, muuuuy tranquilamente comenzábamos a entrar por Sel del Haya. Al rato llegábamos al destino previsto. Lo primero revisar una precaria instalación que teníamos y seguido continuar por la bonita galería. Del silencio surgían murmullos de mis compañeros de faena refiriéndose al por que estar en esa zona perdiendo el tiempo, que si el barro, que si las trepadas que no eran fáciles, que si los pasos estrechos, que si "hay mama", que si "mah mah mah mah mah mah mah". Realmente es una bonita zona de la cueva, pero tiene sus pequeñas complicaciones.
Cuando instalamos por primera vez esa zona, los únicos que habían estado a demás de nosotros, era la gente de las SESS que exploró y topografió la galería. En los dos últimos años espeleólogos, no perdón, domingueros talibanes, que les ha picado la curiosidad al ver cuerdas (algo normal en principio), han entrado en la galería y lo único que se les ha ocurrido además de pisarlo todo, ha sido el dejar su marca o mejor dicho su firma por cualquier pared, roca, suelo (esto es anormal). ¿A quien se le ocurre a estas alturas ir dejando su nombre escrito en una cueva? no soy capaz de entenderlo. Mucho mejor que todo esto es lo siguiente, en esta galería hay una zona de bonitas formaciones al la que se accede subiendo por una rampa de barro. Ya en el balcón en la que se encuentran las formaciones a un iluminado que se creía algo místico (suponemos que es el mismo personaje de los nombres) nos dibujó una espiral con numeritos y un escrito que rezaba algo asi como "a lo etereo que es el tiempo y el espacio". Todo muy bonito pero mejor pintado en su casita. Señores, las cuevas, la montaña, la tierra y en general todo lo que queramos preservar o conservar hay que intentar dejarlo tal cual está después de nuestro paso, que nuestra presencia sea insignificante para la cavidad intentando crear el mínimo impacto, y que los futuros visitantes se lo encuentren tal cual lo vio la primera persona que pisó en ese lugar. Es un tema de educación, de educación hacia nuestra tierra, nada más. Un ejemplo de lo que se debe hacer, Conservación. Para la próxima entrega habrá caña para la gente que tira basura, peladuras de naranja, carburadas y un largo etc de mierda por cualquier sitio de la cueva. Esta vez intentaré que venga documentado con unas buenas fotografías.
Volviendo al tema de la galería que estábamos revisando, lo que me interesaba de esta era conocer su parte final, justo donde desemboca y se une de nuevo a la red principal. Quería ver alguna posible continuación y bualá!! Mientras Manu y yo hacíamos unas fotos, Pelos y Jara dándose una vuelta vieron esa posible continuación. Ya todos juntos, hicimos alguna que otra trepada y accedimos a la zona que resultó mejor de lo esperado y muy interesante...
Ya con la hora encima, fuimos retrocediendo sobre nuestros pasos y en una zona de la galería principal evidenciamos una chimenea con restos de mina que podía conectar directamente con alguna labor minera, en una zona cercana a la entrada de Sel del Haya. Esto nos ahorraría mucho tiempo de aproximación y un acceso posiblemente más cómodo. Lo apuntamos para revisarlo en la siguiente salida. A eso de las 7 pm salíamos por la mina, no muy cansados pero contentos.
Habíamos acordado pasar un par de semanas de descanso para empezar después a explorar con ganas, pero el martes propuse el hacer una salida ligera a revisar y continuar unas cosillas que habíamos dejado a medias hace dos años y medio. Seduje a la gente con un "tranquilos, no hay barro, sólo hay que andar por zonas amplias y cómodas, se llega en media hora"...no se por que pero no me lo creía ni yo. Me estaba recordado a alguien que utiliza las mismas artimañas para camelar a sus posibles presas. Por supuesto todo era mentira, hay barro, se necesitaba el equipos para subir por cuerda, gateras, pasos estrechos etc. Todo lo contrario a lo que les había vendido, pero no había otra forma. Quedamos para salir finalmente Jara, Manu, Pelos y yo el sábado de buena mañana a eso de las 10:40 para mi, 11 para el resto. Por una vez llegaba a la hora y me tocaba esperar como castigo a mis continuos retrasos. Despegamos hacia Udías y a eso de la 12, muuuuy tranquilamente comenzábamos a entrar por Sel del Haya. Al rato llegábamos al destino previsto. Lo primero revisar una precaria instalación que teníamos y seguido continuar por la bonita galería. Del silencio surgían murmullos de mis compañeros de faena refiriéndose al por que estar en esa zona perdiendo el tiempo, que si el barro, que si las trepadas que no eran fáciles, que si los pasos estrechos, que si "hay mama", que si "mah mah mah mah mah mah mah". Realmente es una bonita zona de la cueva, pero tiene sus pequeñas complicaciones.
Volviendo al tema de la galería que estábamos revisando, lo que me interesaba de esta era conocer su parte final, justo donde desemboca y se une de nuevo a la red principal. Quería ver alguna posible continuación y bualá!! Mientras Manu y yo hacíamos unas fotos, Pelos y Jara dándose una vuelta vieron esa posible continuación. Ya todos juntos, hicimos alguna que otra trepada y accedimos a la zona que resultó mejor de lo esperado y muy interesante...
Ya con la hora encima, fuimos retrocediendo sobre nuestros pasos y en una zona de la galería principal evidenciamos una chimenea con restos de mina que podía conectar directamente con alguna labor minera, en una zona cercana a la entrada de Sel del Haya. Esto nos ahorraría mucho tiempo de aproximación y un acceso posiblemente más cómodo. Lo apuntamos para revisarlo en la siguiente salida. A eso de las 7 pm salíamos por la mina, no muy cansados pero contentos.
¡Muy buena crónica Sergio! A ver como te queda la siguiente entrega, ja,ja...
ResponderEliminarMeeeeee!!! la siguiente es tuya jejejeje, si no os toca la de este sábado que viene, así que tendréis que veniros fijo a luchar un poco más. A ver si rulan esas foticas.
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